Marta (España) Filipinas, país formado por más de 7000 islas que besan el pacífico es un país que no deja indiferente a nadie que lo visita.
Tres grandes áreas la forman: Luzón, la isla más septentrional, Visayas al centro y Mindanao al sur. Un país lleno de retos como las tele-comunicaciones, la complicación logística para transportar mercancías así como su clima extremo, especialmente en temporada de lluvias y tifones.
Seguramente, todas estas dificultades, hacen que su gente sea tan fuerte, perseverante y flexible. El pueblo Filipino, en su mayoría familias que habitan en zonas rurales con una economía basada en la producción de arroz, convive día a día con grandes retos y dificultades; habiéndose visto obligados muchas veces a abandonar sus hogares y emigrar a otras zonas del país, tras soportar desastres naturales, lluvias torrenciales o falta de alimentos.
Pero sin duda, aquello que te deja indiferente cuando visitas el país ya sea en un viaje de mochilero o bien realizando voluntariado en Filipinas, es la calidez y generosidad del pueblo Filipino, y es que por muy humildes que sean muchas de las familias que allí conocí, siempre están dispuestos a compartir lo poco que tienen ya sean algunas piezas de mango o una silla más para unirte a su almuerzo, y siempre mostrando su mejor sonrisa. Salamat Filipinas!